PRIMERAS REFLEXIONES SOBRE LOS RESULTADOS ELECTORALES EN NEUQUEN
IDEAS PARA UNA CONSTRUCCION COLECTIVA
Hace pocas horas estamos tomando contacto con el resultado electoral. No es mi intención tener una opinión acabada de los mismos sino plantear algunos ejes para ir construyendo colectivamente una conclusión que nos permita abordar nuestro accionar en las elecciones que nos restan en 2019, que por cierto son muchas hasta el 27 de octubre.
Cada provincia tiene sus particularidades y no siempre se puede generalizar en todo. En el caso de Neuquén la existencia de una fuerza provincial como el Movimiento Popular Neuquino que gobierna y gana las elecciones desde 1962 marca una diferencia sustancial con todas las provincias Argentinas.
El hecho que se haya generado la expectativa de que Unidad Ciudadana Frente Neuquino pudiese ganar las elecciones es casi natural como precondición de la batalla que nos proponemos dar. Creíamos o nos hicieron creer que era posible ganar. Que el solo hecho de haber construido la unidad de buena parte de los sectores políticos y sociales del campo nacional y popular era motivo suficiente.
Comparto que la unidad es una premisa indispensable pero ha quedado demostrado que no es suficiente. Me pregunto logramos la unidad de todos los sectores que debíamos unirnos? No tengo respuesta. Veo que varias fuerzas sindicales y partidos de izquierda presentaron listas propias
Fuimos capaces de convocar a todos los que objetivamente se vieron perjudicados por las políticas del macrismo o dimos por sentado que construimos una alternativa a ese proyecto? Fue justo asociar la política de Macri al MPN? Sé que el MPN fue apoyatura de sus nefastas políticas nacionales en ambas Cámaras de la Nación. El pueblo Neuquino lo habrá visto así o pensó que era una estrategia del MPN para para el desarrollo provincial? Estas y muchas preguntas me gustaría que le fuéramos encontrando una respuesta colectiva.
Buscar una respuesta colectiva es parte del desafío por encontrar también una propuesta colectiva para un nuevo gobierno de mayorías en la Nación este 2019. Tenemos el mejor liderazgo y candidata para el país pero Cristina Fernández de Kirchner no puede ser la única que se ponga la construcción de la propuesta bajo sus hombros. Tenemos que poner nuestra cabeza y energías a ese servicio.
No esperar solo a que nos convoquen. Podemos equivocarnos? Por supuesto. Estar dispuestos a la construcción colectiva y a la rectificación es parte de una nueva forma de hacer política que debemos ensayar.
Esperar el sabio dedo para las candidaturas o la elaboración de las políticas quisiera que fuese parte del pasado. No niego que las cabezas de lista no tengan derecho a elegir quienes los acompañan y que den orientaciones principales sobre la política pero somos muchos los que queremos y debemos interactuar.
Lo pienso así también como cambio sustantivo para el próximo gobierno donde el dialogo político y social sea una premisa que nos permita estar siempre en contacto con la realidad y sus demandas; que impida cualquier tipo de burocratización, soberbia y aislamiento. Sé que es más fácil decirlo que hacerlo pero ha llegado la hora de volver mejores.
En el mismo sentido creo que la mejor forma de elegir los candidatos es por medio de las PASO o internas abiertas con reglas claras y entre compañeros, con sistema Dont y sin piso como corresponde entre compañeros que pretendemos tirar del mismo carro para el bien de los humildes de la Patria. Es preferible que se equivoque el pueblo siendo protagonista a que lo resolvamos supuestos iluminados.
Sé que esto es parcial. Solo pretendo disparar ideas para un debate constructivo y que sirva para que podamos ganar. No por nosotros sino para los humildes de la Patria.
Eduardo Sigal